Resistencia a la corrosión

El tipo de acero utilizados comúnmente en la fabricación de ruedas y horquillas que no están provistos de recubrimientos protectores son muy pocos resistentes a ambientes húmedos. El acero se va destruyendo poco a poco con la corrosión. Por ello, las superficies de los componentes de las ruedas vienen provistas de una capa protectora. Aparte de la resistencia de los diversos acabados de la superficie, también debe considerarse que estas capas protectoras pueden ser dañada por efectos mecánicos y, por lo tanto, quedar afectados sus efectos protectores.

Las protegidas con la laca pierden su protección anticorrosiva cuando se daña la capa de laca. El óxido se forma por debajo de la capa de laca intacta que se encuentra en cercanía inmediata del lugar dañado.
En el caso de superficies dañadas pequeñas, las capas galvanizadas presentan la ventaja de que el material cinc tiene propiedades
anticorrosivas.
Como en este margen limite de cinc-acero, el elemento cinc corrosiona más fácilmente debido a los fenómenos electroquímicos, el lugar descubierto no se oxida.

Los productos de la corrosión del cinc “óxido blanco” tienen la tendencia a cubrir el lugar afectado del acero impidiendo así la proliferación de la corrosión.

Los componentes individuales galvanizados son sometidos a un tratamiento químico adicional “cromar”. Al respecto, se distinguen dos clases de cromado: el “azul” y el “amarillo”, ofreciendo el cromado amarillo una protección contra la humedad aún mayor que cromado azul. Aparte de la buena protección anticorrosiva, las capas cromadas destacan por su dureza y su resistencia a efectos mecánicos, tales como rasguños y golpes.
En lo que a los aceros inoxidables se refiere se sabe que tienen un buen comportamiento corrosivo. El material principalmente utilizado es el acero de cromo-níquel del 18%.


Resistencia a temperaturas

La funcionalidad de una rueda depende también de los efectos de temperaturas.
La temperatura relevante para el bandaje resulta de la acción combinada de la temperatura ambiente y del calor producido por el efecto de rodadura. El grado de este efecto de rodadura es determinado por el material, la forma y la carga del bandaje, las características y la longitud del trayecto recorrido.

Cuando se aplican ruedas o centros de plásticos se deberán considerar las influencias de temperatura al escoger el material y el eje apropiado; la capacidad de carga y la estabilidad por ejemplo disminuyen bajo efectos de calor o frío.
La resistencia y la duración de las ruedas, estándar se reduce considerablemente a temperaturas más elevadas. Por ello, han sido desarrollados bandajes y materiales de ruedas especiales que también pueden aplicarse a temperaturas elevadas.


Resistencia quimica

La resistencia química de una rueda debe tenerse especialmente en cuenta en aquellos casos en los que la banda (bandaje) y/o el centro de la rueda tienen contacto con agentes agresivos.
En la tabla que se presenta se indica la resistencia química de algunas bandas (bandajes) y cuerposde ruedas en relación con ciertas sustancias químicas.

Las indicaciones de las tablas representadas sirven únicamente de orientación.
Se debe tener en cuenta que la resistencia química no sólo depende de la clase de la sustancia agresora sino también de la concentración de la misma y de la duración del contacto. Así como de otras condiciones ambientales, tales como temperatura y humedad del aire.

En cualquier caso de duda le recomendamos ponerse en contácto con FLEXELO ARGENTINA, para que, dado el caso, se efectúen ensayos especiales.

Atención:
Las mezclas de sustancias químicas pueden tener efectos completamente diferentes a los que se indican en la tabla.

Se descarta cualquier tipo de obligatoriedad jurídica.

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